Comencé a experimentar con una herramienta de Dremel en 2009 tallando Tikis en ramas de árboles muertos del jardín de mi madre. Entonces descubrí las maravillas de tallar en tablas de skate y me enamoré del proceso mientras tallaba la última tabla que había usado. Desde entonces he estado experimentando y, en 2020, empecé a combinar tablas de skate con resina epoxi mientras jugaba con resinas transparentes en mi trabajo diario como escultor.

Lo más difícil es tratar de minimizar la rotura de piezas pequeñas y poder llegar a puntos intrincados cuando tallas craneos. Y una de las partes más estresantes es verter algo de resina, cruzar los dedos, y esperar que la proporción de mezcla sea la correcta, ya que solo tienes una oportunidad de cubrir tu escultura.

Disfruto mucho creando grandes cantidades de polvo de madera multicolor mientras tallo tablas de skate usadas; remover en profundidad y tallar las formas de un gran bloque de tablas recicladas es también uno de los pasos que más me gusta.

Tengo varios cuadernos de bocetos donde dibujo algunos de mis diseños, así que de vez en cuando, si no estoy inspirado, los reviso y elijo un tema o un diseño que me guste. Por lo general, siempre hay alguna idea rondando en mi cabeza, así que la pongo rápidamente sobre el papel. Puede ser un tipo de diseño que me gusta, un reto técnico, o simplemente una idea general en torno a la comida o alguna referencia infantil de los 90. Y cuando finalmente estoy a punto de comenzar una nueva escultura, hago algunos dibujos e incluso, a veces, creo un modelo 3D.