Cómo hacer marcadores de plantas
- DificultadFácil
Introducción
Seguro que hay muchos marcadores de plantas en el mercado, pero mola más hacerlos por tu cuenta. Ya sea en invernadero, huerto urbano o jardín colgante, con estos marcadores de cobre tendrás tus plantas bien ordenadas; y además, son elegantes, se hacen en un plis plas y duran años. Estos marcadores son perfectos para decorar tu modesto jardín de balcón, y el cobre le aportará un toque fresco e industrial. Solo necesitas un tubo de cobre y algunas herramientas de Dremel, así que... ¿por qué no ponernos ya manos a la obra con este divertido proyecto?
Corta el tubo para crear tus marcadores de plantas
¡Vamos a ello! Ponte el equipo de seguridad y fija el tubo de cobre en una abrazadera, como la Dremel Multi-Vise (2500). Utiliza una minisierra circular para cortar el tubo de cobre según la longitud deseada. Hemos cortado nuestros marcadores a unos 15 cm, pero puedes optar por cualquier otro tamaño. Aplana la parte superior de cada marcador de cobre con un martillo o apriétala suavemente con un tornillo de banco.
Escribe los nombres de las plantas en los marcadores
Cuando las semillas brotan y los tallos empiezan a crecer, lo suyo es poder identificar qué plantas o hierbas son. ¿Cómo? ¡Basta con etiquetarlas! Practica a escribir el nombre de la hierba, verdura o planta en una hoja de papel. Prueba diferentes estilos para ver cuál es el que mejor funciona para tus marcadores. Una vez que le hayas cogido el tranquillo, escribe los nombres en los tubos de cobre con un rotulador. ¡Genial! ¡Ya estamos a punto para el grabado!
Graba los nombres en los marcadores
¡Tus marcadores de plantas de jardín ya están casi listos! Lo último que te queda es grabar los nombres en los marcadores de cobre. Monta la fresa de alta velocidad de 3,2 mm (194) en tu fiel compañera, la multiherramienta Dremel. La Dremel Workstation (577) te proporciona un control adicional. Empieza a grabar utilizando las marcas de un bolígrafo como guía. Ten cuidado de no acabar cortando el tubo. Asegúrate de trabajar a baja velocidad y ve dando suaves golpecitos a tu modesta obra. Aplica alcohol de quemar para eliminar las marcas de bolígrafo. ¡Buen trabajo! ¡Ya tienes tus marcadores de cobre!