Cómo empezar a pegar

Antes de utilizar la pistola de pegar, comprueba siempre que no presente algún daño, como grietas o astillas. Comprueba que el cable eléctrico no esté deshilachado o rasgado. Si la pistola de pegar se ha utilizado antes, asegúrate de que el dispositivo esté desenchufado y limpia la boquilla de cualquier residuo de pegamento antiguo. (Limpia siempre la pistola de pegar justo después de usarla; consulta el consejo 10). Esto permitirá salir bien al pegamento recién fundido. Puedes hacerlo con un paño seco (nunca uses agua en una pistola de pegar).

Ahora que la pistola de pegar ya está preparada, estarás listo para introducir la barra de pegamento. Dependiendo de tu proyecto, necesitará cola multiusos, de color o para madera. Consulta nuestra hoja informativa comparativa para compararlos. Además, las pistolas de pegar tienen diferentes ajustes de temperatura (consulta el siguiente consejo). Comprueba si tienes el tipo correcto de barra de pegamento consultando el embalaje de la barra de pegamento o la página de producto en Dremeleurope.com. Y asegúrate de no sacar nunca una barra de pegamento a medio usar de la pistola de pegar cuando aún está caliente, ya que se podría derramar el pegamento caliente sobre tu piel o sobre alguna superficie.

Las barras de pegamento de colores requieren una temperatura más baja (105 ºC) que el pegamento neutro, así el pegamento mantendrá un aspecto bonito y brillante. Cuando se trabaje con pegamento de color, lo mejor es utilizar la pistola de pegar Dremel 930, con dos ajustes de temperatura. Para saber cuál es el ajuste de temperatura adecuado para tu tipo de barra de pegamento, lo mejor es que consultes el envase de las barras de pegamento o veas nuestra hoja informativa comparativa. El pegamento tarda unos cinco minutos en calentarse del todo. La boquilla estará muy caliente, así que ten cuidado de no apoyarla en ningún material ni tocarla sin guantes termorresistentes.

Ahora viene lo más emocionante. Con la boquilla apuntando hacia abajo, aplica gradualmente presión al gatillo y prueba el pegamento caliente en un trozo de material de desecho, como un cartón, para ver si está listo para usarse. Sabrás que el pegamento está listo cuando se convierta en líquido y se libere al apretar el gatillo. Ahora prueba a practicar con la pistola de pegar hasta que te sientas seguro; recuerda apretar el gatillo con suavidad para controlar el flujo de pegamento. ¡Un poco de pegamento da para mucho! Mantén siempre la boquilla a una distancia segura de cualquier material, ya que está muy caliente y podría dejar marcas de quemaduras en tu material.

Ahora que ya estás listo para utilizar la pistola de pegar, protege las superficies con una cubierta, como una alfombrilla de corte o, para proyectos más pequeños, una almohadilla de pegamento. De este modo, estarás protegido frente a cualquier derrame y, gracias a la almohadilla de pegamento, el pegamento se limpia automáticamente de la superficie de silicona. Además, utiliza el soporte de tu pistola de pegar para apoyarla cuando no estés trabajando con ella. Nunca pongas la pistola de pegar de lado, ya que el pegamento podría gotear, o la boquilla podría crear una marca de quemadura.

Pegues lo que pegues, vidrio, metal, plástico, cuero o madera, es importante disponer de una superficie seca y sin grasa, ya que las superficies aceitosas y lisas no se adhieren tan fácilmente. Si trabajas con vidrio, frótalo con alcohol o limpiacristales. En caso contrario, utiliza agua y jabón. O, si trabajas con madera, lija ligeramente la zona a pegar y límpiala. A continuación, aplica el pegamento y presiona las superficies hasta que se endurezca el pegamento. Para los materiales más grandes, esto puede requerir una abrazadera, para los más pequeños una banda elástica debería ser suficiente. Deja pasar 24 horas para que el pegamento se endurezca bien.

Una pistola de pegar, en particular la Pistola de pegar Dremel 940, es perfecta para los pequeños trabajos de reparación en el hogar, ya que se puede utilizar sin cables y tiene un ajuste de temperatura más alto. Funciona especialmente bien en madera y plásticos de interior, pero también puede reparar alfombras y suelos. ¿Estás pensando en arreglar los zócalos? Prueba con el pegamento caliente para hacerlo de manera suave y sin clavos. Y la próxima vez que montes un mueble, puedes utilizar cola caliente en pequeñas uniones, molduras y para el montaje.

Te sorprenderá lo que puedes hacer con una pistola de pegar caliente. Por ejemplo, prueba a utilizar pegamento caliente como truco doméstico antideslizante. Basta con aplicar pegamento caliente en la parte inferior de los calcetines, las zapatillas, las alfombras o los laterales de las perchas, dejar secar el pegamento y ¡ya está, no resbala!

Si tienes ganas de dar rienda suelta a tu creatividad con el pegamento caliente, un proyecto divertido para principiantes es crear objetos en 3D para enganchar a, por ejemplo, marcos de fotos, horquillas o pendientes. Para ello, basta con rellenar un molde de silicona con cola caliente (de color). Puedes utilizar moldes de cubitos de hielo, moldes de galletas, moldes de decoración de tartas o cualquier otro molde que te guste. Introduce el pegamento caliente en el molde inclinando la pistola de pegar y dirigiéndolo primero hacia las esquinas, para luego ir rellenando el centro. Visualiza esta masterclass para aprender exactamente cómo hacerlo.

Cuando hayas terminado de pegar, desenchufa siempre la pistola de pegar antes de limpiarla. Para evitar que el pegamento de la boquilla se fije, límpialo rápidamente con un paño seco. La boquilla seguirá estando caliente, así que ten cuidado: ¡utiliza siempre guantes termorresistentes! Sigue leyendo más en este artículo. Si ya se ha fijado en el material el exceso de pegamento y ha quedado superpuesto, puedes recortarlo con unas tijeras. Para los hilos de pegamento, calienta un poco el pegamento con un secador de pelo para derretirlo y luego límpialo con un paño.