El Día de los Muertos es una festividad mexicana en la que se combinan los rituales prehispánicos, las religiones europeas y la cultura española. Contrario a la creencia popular, no es una versión mexicana de Halloween. La festividad empieza desde el 28 de octubre y las principales celebraciones son el 1 y 2 de noviembre. Es en esas fechas cuando se abren las puertas del cielo, las fronteras entre el mundo real y espiritual se disuelven, y las familias dan la bienvenida a las almas de sus seres queridos ya fallecidos, aunque sea solo por unos instantes. La celebración, que se considera una celebración de la vida y no de la muerte, suele ir acompañada de comida, bebida y música. Son momentos también en los que las familias se reúnen para compartir historias de sus seres queridos y mantener así viva su memoria.
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